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Los muslos de pollo frescos son una buena fuente de proteína magra, que ayuda a mantener y reparar los músculos, la piel, el cabello y las uñas .
También aportan hierro, que previene la anemia, y zinc, que fortalece el sistema inmunitario .
Además, contienen vitaminas del grupo B, que intervienen en el metabolismo energético y el funcionamiento del sistema nervioso .
Los muslos de pollo frescos tienen más grasa y calorías que las pechugas, pero también más sabor y jugosidad .
La mayor parte de la grasa se concentra en la piel, por lo que se puede retirar antes o después de la cocción para reducir el aporte calórico .
La grasa del pollo es mayoritariamente insaturada, lo que significa que ayuda a reducir el colesterol malo y a prevenir las enfermedades cardiovasculares .
Los muslos de pollo frescos se pueden preparar de muchas formas: al horno, a la plancha, al ajillo, en salsa, en guiso, etc.
Lo importante es elegir una técnica de cocción que no añada mucha grasa ni sal, y acompañarlos de una guarnición de verduras, ensalada o arroz integral . Así se obtiene un plato equilibrado, nutritivo y delicioso .
Los muslos de pollo frescos son una buena fuente de proteína magra, que ayuda a mantener y reparar los músculos, la piel, el cabello y las uñas .
También aportan hierro, que previene la anemia, y zinc, que fortalece el sistema inmunitario .
Además, contienen vitaminas del grupo B, que intervienen en el metabolismo energético y el funcionamiento del sistema nervioso .|